Entradas

Mostrando entradas de mayo, 2018

Cotidianidades... 211

Imagen
Entré al tercero de primaria convencido de que habría de ser la continuación del infierno que viví durante mi segundo año. La profesora que nos asignaron pareció dispuesta a darme la razón, y a los pocos días, echando mano de criterios pedagógicos del siglo pasado, nos acomodó de acuerdo a nuestro nivel de aprovechamiento. A mí me tocó hasta atrás en la fila de los más atrasados, es decir, para copiar sólo me quedaba el compañero de adelante, quien como yo, era poco confiable. No recuerdo que mis compañeros me hubieran acosado por la posición que ocupé en el salón de clases, de todas formas con la humillación personal tenía bastante para sentirme mal conmigo mismo, y no encontraba de dónde asirme para escapar de ese sitio en que me colocaron mis malas calificaciones y, por supuesto, esa condenada profesora. Para mi buena suerte, la profesora se jubiló un mes después, y su lugar fue ocupado por una maestra nueva de quien poco se sabía. Recuerdo que la directora llegó a present

Cotidianidades... 210

Imagen
El guateque familiar se armó sin estar planeado. Mientras algunos propusimos ir por la cena, otros se apuntaron para ir por las bebidas, y adultos y niños salimos a cumplir con nuestras respectivas encomiendas. El querubín se subió al auto de su padrino porque ahí había más niños, y al llegar a su destino, mientras se estacionaban, descubrió con asombro que se desplegaba una pantallita con cámara de visión trasera: —¡Órale, tiene computadora! —dijo el niño. —Es para que te estaciones más fácil —le explicó su primo y le preguntó: — ¿El coche de tus papás no tiene? Mi hijo, cruel en su inocencia, respondió: —No, no la necesitan. Ellos sí saben manejar. Claro que ahí se desató un debate infantil, en el que se esgrimieron argumentos para dejar en claro qué padres eran los mejores al volante. Todos nos reímos con la anécdota, aunque internamente me pregunté cómo y cuándo debía comenzar a enseñarle a mi hijo a ser “políticamente correcto”, sobre todo en esta época en que hay

Cotidianidades... 209

Imagen
—¡Un Cristo caminando! —dijo el querubín con el mismo tono con que hubiera dicho “ahí va el señor de las nieves” o “acaba de pasar un ave”. Me acerqué a ver de qué se trataba, y descubrí a un señor con short blanco, playera roja y tenis que traía sobre el hombro, formando una cruz, dos largos palos de madera. Otro hombre, más joven que el primero aunque también en short, se acercó a ayudar a cargar uno de los maderos, a lo que el primero respondió: —¡Hasta que te acomediste! —¿Quiénes son? —me preguntó mi hijo y le respondí lo primero que se me vino a la mente. —El de atrás se llama Cirineo, y al de adelante ya lo conoces —lo cuál era verdad—, es el señor de la tiendita. Detrás de ellos aparecieron un grupo de hombres, unas pocas mujeres y varios niños. Otros dos cargaban dos maderos más, y entre risas y bromas se instalaron en un llano muy cerca de donde estábamos. —¡Vamos a jugar futbol! —nos aclaró un borrachín que iba rezagado del grupo— Vengan con nosotros, si quiere